viernes, 12 de marzo de 2010
Perdido
Sigo buscándome pero no hay caso,
me perdí.
En este vacío lleno de dolor,
solo hay alegría bañada de tristeza,
donde el corazón no se encontró con la razón
y solo veo tu cruel silencio,
donde mi honda resignación es un invisible veneno en mi vida,
como lo fueron tus caricias y tus miradas, llenas de rabia de culpas ajenas.
Apostar todo, por nada no era negocio
pero el amor es la ruleta más letal,
y perdí.
Ahora no hay palabra en mi que me de consuelo.
Solo hice un esfuerzo humano,
que encontró en tu respuesta,
el desprecio más inhumano.
Ahora camino perdido, dudando de mis pasos,
la ceguera del dolor y la desazón son el fiel reflejo de mis actos.
Mi sonrisa miente ante los demás, creídos de mi alegría espontánea.
Pero el espejo me muestra la tristeza más oscura
de mi alma solitaria una vez más sin sentido.
Mis ojos son un llanto mudo, para tu razón vacía de palabras.
Ayer me perdí, hoy sigo perdido, mañana espero no perder...
(escrito hace varios meses, con necesidad de ver la luz algún día...)
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